lunes, 17 de junio de 2013

LA IGLESIA CRISTIANA CATÓLICA

La Iglesia es el grupo de personas del mundo entero que están bautizadas y creen en Jesús y todo lo que Él nos enseñó.
Cuando Jesús vino al mundo eligió doce personas (los apóstoles) para que pudieran escuchar todo lo que Él enseñaba y  contárselo a otros. Los apóstoles fueron los primeros que formaron la Iglesia y cuando Jesús resucitó y se fue al cielo, ellos fueron por distintos pueblos y ciudades contando lo que Cristo les había enseñado. Después fueron haciendo sacerdotes a otros hombres por medio de una ceremonia  llamada Orden Sacerdotal.
Jesús quiso dejar un jefe de la Iglesia, por eso de entre sus doce apóstoles, eligió a uno, Pedro. Hoy día, la Iglesia sigue teniendo un jefe que es el sucesor de Pedro, este jefe lo llamamos Papa. El Papa actual es Francisco del que ya hemos hablado en otras entradas del blog.

jueves, 13 de junio de 2013

CUENTO OLIMPÍADAS ESPECIALES (SOLIDARIDAD)

Hace algunos años, en las olimpíadas para personas con discapacidad de Seattle, también llamadas Olimpíadas especiales, nueve participantes, todos con deficiencia mental, se alinearon para la salida de la carrera de los cien metros planos. A la señal, todos partieron, no exactamente disparados, pero con deseos de dar lo mejor de sí, terminar la carrera y ganar el premio. Todos, excepto un muchacho, que tropezó en el suelo, cayó y rodando comenzó a llorar...Los otros ocho escucharon el llanto, disminuyeron el paso y miraron hacia atrás. Vieron al muchacho en el suelo, se detuvieron y regresaron... ¡Todos! Una de las muchachas, con síndrome de Down, se arrodilló, le dio un beso y le dijo: "Listo, ahora vas a ganar". Y todos, los nueve competidores entrelazaron los brazos y caminaron juntos hasta la línea de llegada. El estadio entero se puso de pie y en ese momento no había un solo par de ojos secos. Los aplausos duraron largos minutos, las personas que estaban allí aquél día, repiten y repiten esa historia hasta hoy.

(Juan Camilo López)

SAN PELAGIO O PELAYO

Nació probablemente en el año 912, de una familia acomodada y profundamente cristiana, y recibió una sólida formación.
Tenía un tío llamado Hermoigio que estaba en la cárcel. Era prisionero de los musulmanes y parece que Pelayo se intercambió por él y se quedó en prisión. El niño tenía unos diez años. Pasó tres años en prisión, donde creció y se convirtió en un joven muy hermoso y de agradable presencia. La fama de su hermosura llegó hasta el califa, que ordenó que lo trajeran a su presencia.
Cuando Abderramán vio a Pelayo le ofreció honores y cargos importantes si renegaba de su fe, pero Pelayo los rechazó: Todo eso, oh rey, es nada. Yo soy cristiano, lo fui y lo seré: nunca negaré a Cristo, pues cuanto prometes acaba, y Cristo, a quien yo adoro, no tiene fin, como no tiene principio.
Abderramán, viendo que no conseguía nada, ordenó que se le torturara; y como tampoco esto daba resultado, encolerizado, decretó para él una muerte sumamente cruel: que le cortaran uno a uno sus miembros y que lo arrojaran al Guadalquivir.
Pelayo no se resistió ni se quejó durante la ejecución, que duró seis horas. Finalmente pusieron fin a su vida, cortándole la cabeza».
Los cristianos de Córdoba recogieron sus restos del río y los sepultaron con gran veneración.
La fama de santidad de este niño se propagó rápidamente por toda España e incluso en el exterior.

SANTO DOMINGO SAVIO

Domingo Savio nació en Italia (1842) en una familia muy humilde. De pequeño era buen estudiante y muy piadoso, por lo que fue admitido para recibir su Primera Comunión a los siete años, cuando en aquellos tiempos se hacía a los doce.
Ese día escribió unos propósitos que cumplió toda su vida:
1. Confesaré y comulgaré a menudo.
2. Quiero santificar los Domingos y fiestas.
3. Mis mejores amigos serán Jesús y María.
4. Antes morir que pecar.
A los doce años conoció a San Juan Bosco y se unió a él para que le enseñara a vivir las virtudes cristianas y seguir su propio camino. Domingo pensaba ser sacerdote, pero una pulmonía acabó con su vida a los quince años.
Rápidamente se difundió su fama de santidad. Pio XI dijo: «fue santo porque luchó para vencer los malos ejemplos y tentaciones, y corresponder generosamente a la Gracia». Pio XII lo declaró santo en 1954.