martes, 25 de octubre de 2011

VALOR: DIÁLOGO


El diálogo es una conversación entre dos o más personas. A través de él se organiza la vida familiar, escolar y laboral. Los amigos se hacen más amigos. El intercambio de pensamientos y emociones con las palabras hace que las relaciones entre personas sean más duraderas e intensas.
Pero, dialogar no es fácil, la habilidad para hacerlo se aprende en la infancia, aunque nunca es tarde si estamos dispuestos.

Hay diálogo cuando:

- No somos egoístas y valoramos a los demás.
- Escuchamos las razones del otro.
- Nos interesamos por los que piensan de modo diferente a nosotros para que nos ayuden a ver las cosas que no comprendemos.
- Somos tolerantes y respetuosos.
- Prestamos total atención a quien nos habla.
- Sabemos ponernos en el lugar del otro para entenderlo.
- Estamos dispuestos a cambiar de opinión.
- Dialogamos en un clima de amor, serenidad y sencillez.

Las personas que no saben dialogar suelen terminar solas. No nos resulta muy agradable estar con ellas porque siempre hablan y hablan y nunca se interesan por los asuntos del otro y cuentan y cuentan y nada les interesa nuestra opinión.

En la página web de «El huevo de chocolate» he encontrado este cuento dialogado. Leámoslo a modo de ejemplo.

Cuenta una antigua leyenda, que un niño, que estaba a punto de nacer le dijo a Dios:
- Me dicen que me vas a mandar mañana a la Tierra, pero... ¿cómo viviré tan pequeño e indefenso como soy?
- Entre muchos ángeles escogí uno para ti, que te está esperando, él te cuidará.
- Pero aquí en el cielo, no hago más que cantar y sonreír; eso basta para ser feliz.
- Tu ángel te cantará, te sonreirá todos los días y tú sentirás su amor y serás feliz.
- ¿Y cómo entenderé a la gente que me hable, si no conozco el extraño idioma que hablan los hombres? ¿Y qué haré cuando quiera hablar contigo?
- Tu ángel te juntará las manitas y te enseñara el camino para que regreses a mi presencia, aunque yo siempre estaré a tu lado.
En ese instante, una gran paz reinaba en el cielo, pero ya se oían voces terrestres y el niño presuroso, repetía suavemente:
- Dios mío, si ya me voy, dime su nombre... ¿cómo se llama mi ángel?
- Su nombre no importa, tú le dirás «mamá»...

«Dios no pudiendo estar en todas partes puso en el mundo a las madres»
( Proverbio árabe)

Actividades:

- Vamos a imaginarnos que entre dos niños ha surgido un problema. Escribe un diálogo por medio del cual busquen una solución.
- No solamente se dialoga con palabras, también lo podemos hacer con gestos. Formamos parejas y realizamos diálogos sin palabras. Nos resultará muy divertido.
- Dibujamos en tres o cuatro viñetas una mini historia. No le puede faltar el diálogo.

miércoles, 19 de octubre de 2011

VALOR: PAZ

La paz es un valor que surge dentro de nosotros mismos y debemos alimentarlo día a día.
La paz es fruto de saber entender y escuchar las necesidades de los demás antes que las nuestras.
Es el resultado de una buena convivencia entre las personas.
Si queremos vivir en un mundo donde reine la paz todas las personas tienen que tener las mismas oportunidades y a todas les tienen que ser respetados sus derechos fundamentales.
Si queremos trabajar por la paz tenemos que:
- Ser personas dialogantes.
- Aceptar a los demás como son.
- No ser egoístas y querer ponernos por encima de todos.
- Aprender a resolver pacíficamente los conflictos.

Mahatma Gandhi, el mayor maestro de la paz de la historia, no se cansaba de decir que no hay un camino para llegar a la paz, sino que la paz es el camino para llegar a todas partes.
Es decir, si queremos un estado de paz universal, tenemos que construirla allá donde estemos. En nuestra casa habrá paz cuando cada uno viva en paz con el otro, cuando no haya gritos, ni quejas, ni críticas, ni mentiras. Si somos capaces de construir una relación con nuestros padres y hermanos basada en la sinceridad, en el amor desinteresado, en la calma, en la expresión de cariño, en la generosidad..., seguramente tendremos una familia en paz.
En el colegio habrá paz cuando todos los niños se traten bien, cuando haya una relación basada en la confianza y el respeto, cuando todos aprendamos lo mejor del otro.
Gandhi también decía que la paz comienza con una sonrisa. Esto implica estar a gusto con uno mismo y con la vida tal como es.
Una persona irradia paz cuando es capaz de sentirse feliz con las cosas más sencillas como escuchando el canto de los pájaros, dialogando con los amigos, haciendo cosas sin esperar nada a cambio...
Las personas que tienen buen humor, que alegran la vida de los demás, que hacen reír a quien tienen al lado, también harán que las personas cercanas estén en paz.

Para obtener más información sobre la paz, vayamos al índice del blog (debajo de la bolita del mundo) y piquemos sobre paz, encontraremos también canciones y un karaoke sobre este tema.

Actividades:

. Compongamos frases o pareados sobre el tema de la paz.
. Dibujemos en un folio símbolos de paz. Por ejemplo: una paloma, una rama de olivo, dos personas dándose la mano o dándose un abrazo de reconciliación, una bandera blanca, una pipa de la paz, una cruz roja o media luna roja... Una vez realizados los dibujos los pegaremos sobre un gran mural.
. Nos aprenderemos alguna de las canciones sobre la paz y la cantaremos todos juntos.

lunes, 10 de octubre de 2011

VALOR: BONDAD

Todo el mundo habla de que hay que ser bueno, pero pocos dicen cómo se consigue eso, porque una cosa es cumplir con las normas y otra es ser bueno.
Las buenas acciones no son negociaciones. Los actos bondadosos son desinteresados, se realizan para beneficiar, ayudar, atender... a alguien sin esperar nada a cambio.
Las personas buenas disfrutan haciendo cosas buenas para que el mundo sea mejor.
Las buenas acciones son pequeños gestos, detalles, modestas muestras de generosidad y de interés por el otro.
En casa podemos colaborar para que todo esté más ordenado, para que estén más tranquilos y contentos....En el cole puedo ayudar a crear un buen ambiente entre los compañeros, ayudar a un amigo, compartir cosas y mi tiempo.
Cuando las cosas se hacen bien, nos sentimos mejor y también cuando uno se siente bien, hace las cosas mejor.
Es importante saber valorarse, cuidarse y tener el deseo de mejorar cada día, disfrutando con las cosas pequeñas.
Vale la pena ser bueno. Ser bueno es bueno para ti, bueno para los demás y bueno para el mundo entero. Tenemos que intentar que todo el mundo pueda sentirse alguna vez así.

Actividades


. Cogeremos periódicos y recortaremos noticias que nos parezcan buenas. Luego haremos un mural con ellas.
. Trazaremos un camino en el que iremos colocando piedrecitas, una cada vez que realicemos una cosa buena. Al final de la semana contaremos cuantas hemos colocado.
. Haremos dos dibujos uno que trate de una vez que te portaste muy bien y otro cuando te portaste mal. Debajo escribe cómo te sentiste y por qué.
. Imagina que eres una persona mayor. Tienes que cuidar de dos niños que son un poco traviesos. Explica cómo conseguirías enseñarles a ser "buenos".
. Define una persona bondadosa.


COMO EJEMPLO DE PERSONA BONDADOSA TENEMOS A TERESA DE CALCUTA.
Encontraremos más información sobre ella en el apartado paz y en vídeos.

El Señor d
e las cigüeñas

En las elevadas montañas de China vivía un anciano llamado Tian. Su única compañía eran las cigüeñas, y él se encargaba de cuidarlas y alimentar a sus polluelos. Su amistad era tan cercana que pronto lo llamaron “el Señor de las cigüeñas”.

En una ocasión decidió bajar al pueblo, para ver si las personas se acordaban de ser buenas y compasivas. Vistió sus mejores galas, se subió sobre una de las cigüeñas y ésta lo llevó volando. Al llegar encontró a un hombre pobre y enfermo envuelto en harapos y le preguntó:

—¿Cambiaría usted su ropa conmigo? Vine a probar si la gente es buena y no quiero que me reconozcan —explicó. El hombre enfermo aceptó.
Vestido así Tian se sentó en una calle de la plaza esperando que los paseantes lo ayudaran, pero nadie hizo caso. Cansado y hambriento entró a una posada y pidió al dueño algo de comer, explicando antes que no tenía para pagar.
—Con gusto —respondió el propietario, quien le trajo pan y un humeante plato de sopa.

Al día siguiente Tian se presentó de nuevo. Sonriente, el posadero le ofreció un sabroso arroz. La misma situación se repitió durante varios días. En una de esas ocasiones Tian dijo al posadero:

—Usted ha sido un hombre bueno conmigo y tengo una gran deuda por su ayuda.
—Olvídelo, siempre he creído que ayudar a los otros es una gran oportunidad — repuso el anfitrión.
—De cualquier forma debo recompensarlo. Permítame —solicitó Tian. Sacó de su bolsa unos pinceles y unos frascos de pintura y comenzó a pintar un gran árbol en la pared, con varias cigüeñas en su copa.
—¡Qué hermoso! —exclamó el posadero.
—Eso no es nada —respondió Tian. Entonces aplaudió, las cigüeñas cobraron vida y bailaron con gracia al ritmo de su canción. Tian explicó al sorprendido posadero que con ese espectáculo sus clientes estarían muy contentos, y se dirigió a la salida.
—¿Quién es usted? —preguntó el dueño, pero Tian se alejó sin responder.
La fama de las cigüeñas danzantes corrió por el pueblo y, gracias a tantos visitantes el negocio del posadero prosperó. Éste siempre preparaba algunos lugares para los que llamaran a la puerta pidiendo un poco de comida, aunque no tuvieran para pagar.
Mucho tiempo después Tian volvió a la posada. El dueño lo recibió llorando de alegría:
—Gracias a usted mi negocio va muy bien. ¿Cómo puedo recompensarlo?
—Sólo te pido que sigas siendo tan bueno y compasivo como lo fuiste conmigo —respondió Tian. En ese momento tres cigüeñas lo levantaron de la ropa y se lo llevaron volando a las montañas.

El posadero comprendió que Tian era el señor de las Cigüeñas y desde ese día difundió su mensaje de compromiso y amor por el prójimo.

—Cuento tradicional chino. Fuente: www.valores.com.

sábado, 1 de octubre de 2011

APÓSTOLES: San Matías

"Después de la Ascensión de Jesús, Pedro dijo a los demás discípulos: Hermanos, en Judas se cumplió lo que de él se había anunciado en la Sagrada Escritura: con el precio de su maldad se compró un campo. Se ahorcó, cayó de cabeza, se reventó por medio y se derramaron todas sus entrañas. El campo comprado con sus 30 monedas se llamó Haceldama, que significa: "Campo de sangre". El salmo 69 dice: "su puesto queda sin quién lo ocupe, y su habitación queda sin quién la habite", y el salmo 109 ordena: "Que otro reciba su cargo".

"Conviene entonces que elijamos a uno que reemplace a Judas. Y el elegido debe ser de los que estuvieron con nosotros todo el tiempo en que el Señor convivió con nosotros, desde que fue bautizado por Juan Bautista hasta que resucitó y subió a los cielos".

Los discípulos presentaron dos candidatos: José, hijo de Sabas y Matías. Entonces oraron diciendo: "Señor, tú que conoces los corazones de todos, muéstranos a cual de estos dos eliges como apóstol, en reemplazo de Judas".

Echaron suertes y la suerte cayó en Matías y fue admitido desde ese día en el número de los doce apóstoles (Hechos de los Apóstoles, capítulo 1).

Matías se distinguió por su pobreza evangélica, por su austeridad y su generosa caridad; por tanto era todo lo contrario al apóstol que sustituyó, Judas Iscariote, el traidor.

Predicó el Evangelio por Judea y Etiopía.

Su fiesta se celebra el 14 de Mayo.

Se piensa que fue apedreado y luego decapitado.

APÓSTOLES: San Judas Tadeo

Judas conocía a Jesús antes de iniciar Éste su vida pública. Cuando lo llamó como uno de sus apóstoles, lo dejó todo y siguió tras Él.

A la muerte del Maestro viaja a Mesopotamia, primero, donde estuvo sobre diez años. Después regresa a Jerusalén para estar presente en un concilio con todos los apóstoles. Más tarde estuvo con San Simón en Persia donde se piensa que sufre martirio junto a este, pero a él le dan muerte cortándole la cabeza con un hacha.

Escribió una carta que la podemos encontrar en el Nuevo Testamento.


Se le suele representar con una imagen de Jesús en el pecho y con un hacha en la mano.

Sus restos están en Roma, en la Basílica de San Pedro.

Su fiesta se celebra el día 28 de Octubre junto a la de San Simón.

San Judas Tadeo es uno de los santos más populares debido a los numerosos favores celestiales que consigue a sus devotos que le rezan con gran fe.