jueves, 31 de octubre de 2013

LAS CASAS EN TIEMPOS DE JESÚS

Las casas se construían de ladrillos o piedras y cascotes. Las más pobres tenían una sola habitación con nichos para guardar alimentos y utensilios. Había una puerta y una sola ventana alta y pequeña para evitar la entrada de intrusos. La luz penetraba por la puerta que se mantenía abierta y por la noche se iluminaba la estancia con lámparas de aceite.
El tejado era plano y servía para secar la cosecha o para dormir en las calurosas noches de verano.
Las casas de los ricos tenían un patio donde se guardaban los animales. Además a estas casas se les hacían más ventanas en la parte que daba al patio y así conseguían más luz. También se les hacían alrededor del patio dos o
tres habitaciones.
Los muebles de las casas de los ricos consistían en mesas para comer, sillas con respaldo y camas con almohadas y cojines. En las casas de los pobres, si acaso tenían camas, mesas y sillas pero sin ningún tipo de lujo.

LOS VESTIDOS EN LA ÉPOCA DE JESÚS

Debajo de la túnica llevaban una prenda interior llamada calzón (Jesús fue crucificado solamente con el calzón porque su túnica se la habían quitado los soldados).
La túnica era el vestido fundamental, se parecía a un saco; se le cortaba una abertura en forma de V para poder meter la cabeza y en las esquinas se hacían dos cortes para que pudiesen pasar los brazos.
El tejido con el que se confeccionaban las túnicas podía ser lino, algodón o lana, según las posibilidades económicas de cada persona.
Las túnicas de las mujeres eran largas hasta el tobillo y de color azul con bordados alrededor del cuello. Los hombres las llevaban más cortas y de colores. Se sujetaban a la cintura con un cinto de cuero u otro tejido.
Las personas que tenían suficiente dinero se ponían un manto encima de la túnica para protegerse del frío.
Las personas pobres iban descalzas o bien llevaban unas zandalias muy simples con la zuela de cuero de vaca y atadas alrededor de los tobillos.
En la cabeza se colocaban los hombres una especie de turbante y las mujeres un paño cuadrado sujeto por una cinta trenzada, además se tapaban las mujeres la cara con un velo.
La ropa se lavaba poniéndola en la corriente de los arroyos para que arrastrara la suciedad o bien se depositaba sobre una piedra lisa y se golpeaba con un palo hasta que quedaba limpia.

domingo, 27 de octubre de 2013

LAS MUJERES EN LA ÉPOCA DE JESÚS

En aquellos tiempos la vida y costumbres eran muy distintas a las actuales. Cuando las niñas tenían menos de 12 años su padre poseía total poder sobre ellas, hasta tal punto que podía venderlas como esclavas si quería. En el momento que se casaba pasaba a pertenecer al marido. Si éste moría y no habían tenido hijos, la mujer solamente contraía matrimonio con un hermano de su difunto marido.
Para salir a la calle debían llevar el rostro tapado, cubierto por dos velos. Si no lo hacía así, su marido podía divorciarse de ella. Cuando iba por la calle estaba prohibido mirarla e incluso saludarla si estaba casada. Si era soltera debía estar en sus habitaciones y no tener apenas contacto con la gente.
Cuando la mujer vivía en el campo se le permitía que saliera sin velo porque tenía que ayudar al marido en el trabajo, cultivaba la tierra, vendía el producto que obtenía de ella, realizaba la compra en el mercado o iba a coger agua de los pozos que se encontraban, generalmente, a las afueras de su población.
También era costumbre que la mujer no aprendiera a leer ni escribir, solo se les enseñaba a cumplir con las tareas de la casa porque ese era el papel que tenía en la sociedad y en la familia. Las escuelas eran nada más que para los niños y a las chicas no se le enseñaba ni siquiera la lectura de su libro sagrado, Torá.
A Jesús todas estas cosas respecto a la mujer no le parecen bien, para Él hombre y mujer son iguales y no le gusta que la mujer sea discriminada. Por eso en su grupo de seguidores iban tanto hombres como mujeres.