EL "TISBITA"
ELÍAS. Era amigo de la vida al aire libre y gran corredor. Predijo una sequía como castigo por la idolatría de Israel. Durante la misma fue alimentado por cuervos en el arroyo de Querit y cuando se secó fue alimentado por una viuda. En un desafío en el monte Carmelo, el profeta demostró que Jehová Dios, y no Baal, era el verdadero Dios. Entonces Jezabel, esposa del rey Acab, procuró matar a Elías, y éste huyó por el desierto hasta el monte Horeb, en donde Dios lo mantuvo cuarenta días y noches. Elías fue trasladado al cielo sin pasar por la muerte.
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